Te conocí una tarde de invierno. No le diste tiempo al tiempo, ni tampoco a mí.
Yo soy más lento y te lo dije. Tú fuiste más rápida y me lo demostraste.
Trepaste por mis emociones, pegada a mis sentimientos como una enredadera, demasiado cerca, demasiado apretada.
Yo sentía tanto placer como agobio.
Intenté alejarte, pero no pude, por lo que no tuve más remedio que podar tus formas.
Te enfadaste, pero ahora ya puedo respirar de nuevo.
Me he permitido twittear esta entrada en @allamas
Me gusta como destacas la necesidad de liberarse de la toxicidad humana, haya o no sentimientos encontrados
Estas on fire!!
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Gracias Antonio, has hecho bien. Y además con una perfecta interpretación de la toxicidad en forma de enredadera. ¿Estoy on fire? jajaja es lo más bonito que me han dicho hoy. Un abrazo ¡¡
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Te has rodeado regular, por lo que veo 😀😀
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jajaja, por eso mismo, a última hora me paso por aquí, ¿dónde mejor?😁😉
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Qué alivio se siente… Muy bueno!!!
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Gracias Claudia, es necesario ese alivio cuando se siente cerca la sensación de agobio. Pero hay que decidirse a tiempo y no suele ser fácil. Un abrazo
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Ya lo creo…
Abrazos
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Parece que retratas una relación un poco tóxica o quizás haya un desequilibrio entre lo que espera uno y otro de la relación.
Me ha gustado mucho. Un abrazo.
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La toxicidad es también una forma de desequilibrio. En este relato es el principal motivo.
Me alegra que te haya gustado. Gracias por tus visitas. Un abrazo
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Muy bueno Carlos, creo que voy a mandárselo a una amiga, a ver si pilla la indirecta…
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Bien, aunque cada uno debemos tomar nuestras propias decisiones en base a nuestra experiencia, no está de menos a veces, verlo desde fuera, porque con distancia algunas situaciones se perciben mejor. Un abrazo
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Por supuesto, esto es como dejar de fumar, o yo así lo veo. Por mucho que sepas que no te hace bien y por mucho que te insinúen que deberías dejarlo hasta que no lo decides por propia voluntad…
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Así es, ni más, ni menos 😁
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Conciso y evocador.
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Buenas observaciones. Gracias por comentar. Un abrazo
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Wow! Me hizo pensar inmediatamente cómo en ocasiones nos gusta una persona… pero eso no significa que seamos compatibles. Saludos!
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Claro, la compatibilidad nos la dan muchos matices que se descubren con el conocimiento de la otra persona. No olvidemos que todos tenemos «lo nuestro». Un abrazo Blueberry
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Me encanta! Ese símil lo has clavado. Y es que el amor, aunque suene contradictorio por nuestro adoctrinamiento, tiene que hacernos sentir libres!!
Un abrazo, Carlos! 😊 😘
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Gracias Lidia. La relación en pareja no debería someterse a presiones o agobios. La grandeza del amor es que nos hace aún más libres junto a la persona elegida. Otro abrazo de vuelta😉
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Creo que cuando el amor es verdaderamente fuerte, no existe el agobio. No existe porque quieres estar con la otra persona todo el tiempo. Si no hay atracción suficiente, entonces si puede surgir el agobio. Pero pienso que ese agobio esconde otras razones… Bueno, esta es solo mi opinión, claro. Cada uno vive las relaciones de forma diferente. En cualquier caso, un texto muy bueno y reflexivo. Besos
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Hola Mayte, comparto tu comentario, el agobio no existe con un amor fuerte y libre. Pero el agobio que muestra nuestro personaje puede tener distintos orígenes. A veces por desgracia el agobio proviene de actitudes un tanto dominantes o excesivamente persuasivas de uno/una hacia el otro/otra e incluso con un componente sicológico importante que convierten la relación en tóxica para un miembro de la pareja. Otra cosa es que se de cuenta de ello o no, pero eso es otro tema. Gracias por tu aportación al texto. Un abrazo.
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Me he enredado un poco pero … ya.
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jajaja buena observación, espero que te desenredes antes del fin de semana😳
Un abrazo
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Algunas personas no saben amar de otra forma y necesitan estar abrazadas para mantener el equilibrio. Un abrazo.
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El abrazo es algo fabuloso para mantener muchos tipos de equilibrio, mientras “corra el aire”, porque cuando el abrazo ahoga puede ser muestra de otro tipo de relación, como la que intenta mostrar el micro.
Un abrazo Carlos pero corriendo el aire jajaja
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Me gusta porque es un texto lleno de matices y abierto a interpretaciones unas obvias, pero otras no tanto aunque todas coincidentes en el problemas de las relaciones que terminan siendo tóxicas.
Un abrazo.
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Sea cual sea la interpretación, esa falta de libertad en la relación, esa “apretura de la enredadera” hasta el sofoco, no es más que fuente de todo tipo de problemas y sobretodo se pierde la equidistancia entre ambos miembros de la pareja.
Un abrazo Sabius
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Y a algunos les gusta el sofoco aunque digan lo contrario.
Yo como tu texto, le huyo.
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Claro y desde el respeto a todas las posiciones, creo que la actuación tipo enredadora encierra muchos problemas de convivencia, de libertad de decisión, quién sabe si de posesión y cosas peores, en fin un abanico enorme. Se puede amar mucho respetando una sencilla distancia en la relación, porque a veces con un poco distancia tenemos mejor perspectiva de todo. Un abrazo Paula
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¡Qué buen símil, Carlos! Me encanta. Un amor que te hace sentir feliz pero que al tiempo te agobia, y al que tienes que cortar las ramas para poder respirar de nuevo.
Nunca se me hubiera ocurrido comparar un amor así con una enredadera. Genial.
Un beso.
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Me alegro que te haya parecido acertado el símil. El tema es exactamente como lo has descrito, el amor, la felicidad, pero de repente una sensación imprevista de un agobio inesperado. Todos cambiamos y las circunstancias también. A veces podremos adaptarnos, pero otras no.
Un fuerte abrazo Lola (creo que así te llamas…)
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Sí, Lola, así me llamo. Me escondo tras mi alma rural para escribir mis relatos y no todo el mundo me descubre.
Un beso, amigo.
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Genialidad al cien por cien. Gracia infinitas. Besos a tu alma.
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Gracias por tu generoso comentario Maria del Mar.
Abrazos a tu alma.
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Grande Carlos, como siempre me encantan tus micro historias llenas de energía e intensidad. Un abrazo
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Como siempre agradecido por tus palabras, celebro que te haya gustado este micro sobre una situación que puede darse con cualquiera. Un abrazo.
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Buena decisión, un abrazo
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Sin duda, son momentos en los que hay que decidirse, no hay otra.
Gracias por tu visita, un abrazo
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Como en todo: los excesos no son buenos. Pero cada relación de pareja está llena de detalles; sin embargo claramente resulta nocivo actuar como enredeadera.
Me encantó, Carlos.
Un abrazo!!
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Cada pareja es un mundo, incluso cada uno de nosotros lo somos. Pero cuando aparece la opresión, el agobio que puede ser incluso bienintencionado, hay que frenar y hablar antes de que la relación se vuelva tóxica.
Gracias Sara por tus comentarios y un abrazo primaveral😉
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Hola Carlos,
No debió ser ….
Cortito pero lleno de matices, me ha encantado!
Un abrazo! 😉
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Gracias Natalia. Me alegra que te haya gustado y tu apreciación de los matices. Como habrás visto casi todo lo que escribo son micros. Me siento cómodo así (de momento) jajaja. Un abrazo.
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Muy bonito el poema. No sé si te gusta la música mexicana, pero me recuerda a una ranchera que se llama Rama Seca. Saludos 🙂
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Gracias, celebro que te guste. No estoy muy puesto en música mexicana, pero acabo de escuchar «Rama Seca» gracias por tu sugerencia. Un abrazo.
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